a casa está situada en un lugar emblemático en la comarca, por sus manantiales, ha sido un asentamiento humano desde tiempo inmemorial, remontándonos incluso hasta los íberos –siglo IV a.C.– y más luego, a romanos y árabes. Hallazgos en la finca entregados al Museo de Jaén así lo acreditan.
El Marqués de Santillana (1.398 – 1.458), que anduvo por estos lares, se refiere a este lugar en una serranilla:
“Entre Torres e Canena
e cerca del Ayozar
hallé moza de Bedmar
en día de Nochebuena.”
Se halla a 1,5 km de Albanchez de Mágina, un pequeño e interesante municipio del siglo XIII imbricado entre las peñas bajas del Aznaitín –el popular cerro Natín–, coronado por una torre vigía del siglo XIV, conocida por “El Castillo”, declarada monumento en el año 1985. Su Torre del Reloj, que aúna la base mampostera con un campanario de hierro fundido y reloj, de finales del siglo XIX y estética de la Torre Eiffel, es patrimonio inmueble de Andalucía.
A menos de media hora de camino se encuentran dos joyas del renacimiento español que son patrimonio de la humanidad: Úbeda y Baeza. Visita obligada para cualquier persona con mínima inquietud por la cultura, capitaneada en estas ciudades por una espectacular arquitectura.
Tampoco podemos olvidar la relativa cercanía, a unos 80 kilómetros, de la Sierra de Cazorla, lugar de nacimiento del río Guadalquivir y destino también de gran interés para una jornada de excursión, de desearse. En las inmediaciones se puede practicar el senderismo por variadas rutas a parajes naturales de gran belleza en los adentros de Sierra Mágina.
También dispone de interesantes rutas para ciclismo.
Los pueblos más cercanos – el mentado Albanchez, Jimena, Torres y Bedmar, a menos de diez kilómetros– son también dignos de recorrer a pie a la par que de disfrutar su gastronomía local.